Cataluña rechaza el idioma de su país, es decir, España. Desde hoy ser español en una parte de España tan española como Cataluña, costará un poco más. Resulta curioso ver como en regiones semejantes de países semejantes, al menos aparentemente, ocurre lo mismo pero...al contrario. Es decir se potencia el idioma nacional y se opciona el dialecto regional. Aquí no, aquí se trata de alejar a Cataluña de todo lo que tenga tufillo a español. ¿Y la oposición? Pues la oposición, en este y en otros muchos casos...se mantiene en posición Lewinsky.
Tres años lleva ya el tribunal encargado de que todo lo inconstitucional se convierta en legal para decidir algo sobre el Estatuto de Cataluña. Pero, como no es suficiente tiempo para perpetrar la fechoría, María Emilia Casas, responsable del estamento alega que seguirán trabajando en verano para acelerar el proceso...lo mismo dijo el año pasado!
Quizá la solución a todo los males que padece España sea ponernos todos en la posición Lewinsky y pasar de ciudadanos a consumidores, perdiendo así, los derechos que la verticalidad de la columna vertebral nos concedía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Fernando, la oposición en esas zonas es el partido que también está en la oposición nacional. Es el mismo partido que gobierna en otras regiones de España, como Valencia, donde es complicado encontrar colegios que tengan clases en español, aunque no imposible.
ResponderEliminarEl TC tiene su renovación parada porque el partido de oposición y el de gobierno de la nación no se ponen de acuerdo...hay cosas que es complicado entender y que nos harán seguir en la oposición, a mi entender.
Un abrazo y te copiaré tu expresión "Posición Lewinsky".